En el circo de la Liga no sólo ruge la bestia que lleva el 7 en el Madrid o ese monstruo con cuerpo de pulga que dibuja fantasía con un balón cosido al pie. En el circo de nuestro campeonato también rugen los leones de Bilbao, que no son los de toda la vida. Son fieras porque han nacido para serlo, pero también se atreven con los malabares. La nueva jauría de San Mamés araña, muerde y también cuenta con malabaristas del balón. Que nadie se confunda. Este Athletic no sólo es garra, también tiene talento, mucho talento.
Son leones que visten la camiseta rojiblanca, pero no hacen el ruido de otros. El Athletic de Caparrós está quinto en la tabla y dos partidos le separan de la Champions, palabras mayores, lugar para salvajes y bestias que devoran presas por el continente. Ha llegado la hora del Athletic, un Athletic que, sin olvidar sus raíces, se atreve con todo. Decir que los rojiblancos ganan partidos por lo que tienen entre las piernas no es mentir, pero es una afirmación incompleta. Este Athletic también gana porque juega mejor que su enemigo, porque utiliza la cabeza no sólo para rematar, también para pensar. Los leones también bailan, también caminan por un alambre con una red que sostienen los creyentes que acuden a San Mamés cada domingo.
Sangre, sudor y talento
La portería la defiende Gorka Iraizoz, portero de altura y que viste de negro como lo hacía Iribar. Los delanteros se confunden. Ven un bulto oscuro en la portería y le tiran a dar. Mide 1,91, pero también barre la cepa de los palos. Al heredero de El 'Chopo' le protegen gladiadores y un francotirador que hace de lateral derecho por obligaciones del guión. Iraola sería titular en casi cualquier equipo de Europa. Controla sus espaldas y toca el balón como no le corresponde a los defensores de toda la vida. En el otro lateral juega Koikili, un albañil del fútbol, como también lo es Gaizka Toquero. Dios no les ha dado facultades para lucirse. Corren por ellos y por todos sus compañeros.
Los numerosos problemas físicos de Amorebieta han facilitado la alternativa de Borja Ekiza, chaval de pocas palabras al que extrañará verle cometer un error. Jugar al lado de otro joven con mente de adulto como San José está siendo una clase avanzada para el 32, que está aprendiendo muy rápido. En esa escuela el más listo de todos es Muniain, que es un rebelde y juega al fútbol para maldecir tópicos. No hace falta ser alto ni viejo para atreverse e imprimir respeto. Iker disfruta con Los Simpson y seguro que también lo haría con Daniel El Travieso. Es un demonio y su transcendencia en el equipo aumenta con el paso del tiempo. Es un cachorro con dientes de leche, pero ya manda en el campo más que la mayoría.
El centro del campo tiene recorrido y gasolina. Así ha sido siempre el Athletic, pero ahora tiene hasta artículos de lujo. Gabilondo, Susaeta y David López parece que tocan el balón con la mano aunque el reglamento no lo permita. En esa zona, la voz de mando es Javi Martínez, futbolista total, que aparece por todos los rincones del césped y ve portería con facilidad.Gurpegui juega con el corazón y Orbaiz lo hace con la cabeza, que piensa, lento, pero con profundidad.
Un delantero como una catedral y 'Jokin'
El nuevo Athletic sería inexplicable sin Fernando Llorente, el macho alfa de la jauría. Es un delantero como una catedral y responde por arriba y por abajo. Sus largas piernas de cigüeña se confunden con las piernas de un hábil equilibrista. El que presenta la función en el circo esCaparrós, entrenador que cuando habla sube el pan. Grita desde la banda y comienza el número, el de los leones y el de los malabaristas. Así es el nuevo Athletic, un equipo con garra y con clase. Un día los leones no rugirán, hablarán y darán un discurso al público. El fichaje deAnder Herrera para la próxima temporada es otra declaración de intenciones.
